A las 10:50, Soledad Silveyra salió de la Capilla Ardiente donde se acercó para darle el último adiós a Roberto Sánchez. Pero descompensada por la emoción, debió volver a entrar al Salón de los Pasos Perdidos. En estos momentos espera poder retomar su camino a su casa. La actriz estuvo alrededor de una hora junto a Olga Garaventa. “Quería estar con su señora, besarlo y decirle por última vez cuánto lo quería”, comentó Solita en el momento que intentaba dejar el Congreso.
“Vine a despedir a un ser particular que significó mucho en mi vida. Ver un cuerpo muerto siempre nos llena de angustia, ahora me voy, quiero subirme al auto y poner su voz. La última vez que lo vi fue también en este lugar, cuando le hicieron el homenaje con el Premio Domingo Faustino Sarmiento”, recordó. “Hay mucha gente que quiere venir y no puede, no importa la cantidad de los que estén sino los que piensan en él”, sostuvo con respecto a las escasas visitas del mundo del espectáculo. “Fue un caballero, de él aprendí a saludar primero a los de abajo y luego subir”, dijo y debió regresar al recinto al sentirse descompensada emocionalmente.
Fuente: Puroshow
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