Soledad Silveyra de paseo por punta, embelesada con su nieta

Fue sin dudas, un año muy particular para Soledad Silveyra (57). En lo laboral, 2009 le preparo su labor en "Un Tiempo Después", en Telefé, ciclo con el cual retornó a la conducción y se animo a las entrevistas (la más comentada fue la que le realizo a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner). En cuanto a lo sentimental su relación cada vez mas afianzada con el ex vicepresidente Carlos "Chacho" Álvarez, dio pie a que la prensa echara a correr rumores de boda. Enseguida, ella misma se encargo de desmentirlos, dejando en claro que se encontraba muy bien en pareja pero que no se iba a casar.
Por otra parte, la actriz recibió un maravilloso regalo: el nacimiento de su segunda nieta, Clara, de su hijo Balthazar y Romina, quienes también son padres de otra nena llamada Inés.
Pero como en la vida no todo son rosas, la estrella también sufrió un golpe terrible, ya que su ex marido y padre de sus dos hijos, José Maria Jaramillo, falleció a raíz de un melanoma. La pareja se había casado en 1970, separándose doce años después. A pesar del tiempo y las circunstancias, ese cariño tan especial que se tenían nunca se apago y se habían convertido en amigos del alma.
En diciembre, Solita se sometió a una intervención ocular en Mendoza y, poco antes de navidad, viajo a Punta del Este.
En estas adoradas playas uruguayas ya estaban instalados sus hijos, Balthazar y Facundo, con sus respectivas familias. Los herederos de la rubia actriz alquilaron una casa sencilla a dos cuadras del centro de "La Barra", para pasar las vacaciones hasta el 15 de enero. Allí se instalo Solita para estar con ellos durante la Nochebuena. Pero con quien mas horas pasó la actriz fue con Inés, su nieta mayor. Sin ocultar el entusiasmo de abuela dichosa, ambas compartieron juegos con una alegría desbordante. Por las tardes, salieron a recorrer varios negocios. Soledad la mimaba comprándole ropa y llevándola a tomar helado, prueba de que esta chocha con su rol de abuela. Se la vio muy pocas veces en la playa. Si el sol estaba muy fuerte, prefería quedarse en la casa leyendo. Su estadía en punta del Este fue más bien breve: estuvo apenas una semana ¿El motivo? Quería recibir 2010 junto a su gran amor, Chacho Álvarez. Por tal motivo, el 28 hizo las valijas y voló para encontrarse con el político en su Buenos Aires querido.


Fuente:Pronto